La Fiscalía de Estados Unidos busca un gran castigo para los participantes en el ataque mortal del 6 de enero contra el Capitolio. Es lo que se deduce de la petición realizada a los magistrados que juzgarán a un hombre que fue grabado golpeando a un agente de policía y a otro que se convirtió en símbolo del asalto por su tocado con cuernos.
Los abogados del Gobierno han solicitado al juez que dicte una condena de prisión de 44 meses para Scott Fairlamb, un ex luchador de artes marciales mixtas de Nueva Jersey, quien se declaró culpable en agosto de agredir a un oficial de policía. Fue grabado gritando a los oficiales por sus cámaras corporales antes de empujar a uno y luego darle un puñetazo en la cara.
La abogada del Departamento de Justicia, Leslie Goemaat, destacó el entrenamiento en artes marciales de Fairlamb, así como también los enfrentamientos anteriores con la ley. «Estaba entrenado para lanzar un puñetazo y era muy consciente de la lesión que podía causar», dijo.
La letrada también mencionó un video que Fairlamb grabó durante los disturbios en el que dijo: «¿Qué hacen los Patriots? ¡Los desarmamos y luego asaltamos el maldito Capitolio!». «Las propias declaraciones del acusado ese día sugieren que vino preparado para la violencia», dijo Goemaat.
700 acusados
Alrededor de 700 personas han sido acusadas de unirse al asalto del Capitolio. Todo ocurrió el 6 de enero, cuando los partidarios del expresidente Donald Trump se enfrentaron a la policía, rompieron ventanas y cargaron contra el edificio en un intento de revertir su derrota electoral.
Hasta el momento, unas 120 personas se han declarado culpables y dos docenas han sido condenadas. La mayoría de las declaraciones de culpabilidad han involucrado delitos menores no violentos que conllevan sentencias de cárcel breves.
En el caso de Jacob Chansley, conocido por su tocado con cuernos, los fiscales recomendaron una sentencia de cuatro años y tres meses. La sentencia contra el llamado ‘chamán de QAnon’ se conocerá el 17 de noviembre.
En un informe, el abogado defensor de Fairlamb le pidió al juez que tuviera en cuenta los aproximadamente 11 meses de cárcel que el acusado ya ha cumplido de forma preventiva y que no agregue tiempo adicional.
El letrado afirmó que su cliente había aceptado la responsabilidad de sus acciones, y agregó que Fairlamb está interesado en demostrar «a sí mismo, a su familia y amigos, que ya no es la persona que se ve en esos videos preocupantes».